CNEIP
VOLUMEN  6  |   NÚMERO 1  |  2024

Artículo de investigación
CNEIP
Uso dual de cannabis y tabaco: percepción de riesgo, consecuencias y razones para buscar tratamiento
Dual use of cannabis and tobacco: risk perception, consequences and reasons for seeking treatment
DOI  https://doi.org/10.62364/cneip.6.1.2024.237
Diana Berenice Bustamante Aguilar*, Ana Patricia Ancira Guzmán*, María Rosales García** y Jennifer Lira Mandujano*
Universidad Nacional Autónoma de México*
Universidad Michoacana de San Nicolás de Hidalgo**

Citación
Bustamante, D. B., Ancira, A. P., Rosales, M., y Lira, J. (2024). Uso dual de cannabis y tabaco: percepción de riesgo, consecuencias y razones para buscar tratamiento. Enseñanza e Investigación en Psicología Nueva Época, 6(1), 1-12. https://doi.org/10.62364/cneip.6.1.2024.237

Artículo  enviado 30-09-2023,   aceptado 22-11-2023,   publicado 01-05-2024.  

Resumen
El uso dual de cannabis y tabaco es una problemática social y de salud permeada por una percepción de riesgo, este fenómeno se ha observado en países donde hay mayor aceptabilidad social derivado de la legalización generando un bajo interés en la búsqueda de tratamiento. Por tal motivo el objetivo del presente trabajo fue identificar y analizar la percepción del riesgo, consecuencias del consumo y las razones para buscar tratamiento en consumidores duales de cannabis y tabaco. Se realizó un estudio con enfoque cualitativo donde se entrevistaron a dieciocho usuarios duales, las entrevistas se analizaron mediante el análisis de contenido. Los participantes reportaron una menor percepción de riesgo para el consumo de cannabis, dificultad para identificar consecuencias negativas de su consumo, así como desinterés en cesar el uso dual.

Palabras clave
uso dual, cannabis, tabaco, cualitativo, adicciones.


Abstrac
Cannabis and tobacco co-use is a social and health problem, permeated by a low perception of risk; this phenomenon has been observed in countries where there is greater social acceptability derived from legalization and has generated a low response to seeking treatment. The objective of this work was to identify and analyze the risk perception, consequences of their use and the reasons for seeking treatment. A study was carried out with a qualitative approach where eighteen dual users were interviewed; the interviews were analyzed through content analysis. Participants reported a lower perception of risk for cannabis use, difficulty identifying negative consequences of their use, as well as a lack of interest in stopping dual use.

Keywords
dual use, cannabis, tobacco, qualitative, addictions.


El uso dual de sustancias psicoactivas como tabaco y cannabis se ha convertido en una práctica común entre los consumidores que puede ocurrir de dos formas: 1) uso simultáneo, mezclar el cannabis y el tabaco en un cigarro, puro o algún dispositivo electrónico y consumir ambas sustancias al mismo tiempo (práctica denominada mulling) o  2) uso secuencial, hacer uso de ambas sustancias en diferentes momentos, dejando pasar unos minutos entre el uso de cada sustancia (Banbury et al., 2013; Hindocha & McClure, 2020; McClure et al., 2020; Voci et al., 2020). El uso dual de tabaco y cannabis se define como el uso de ambas sustancias en los últimos 30 días (Akbar et al., 2019; Stewart et al., 2020).

La Encuesta Nacional de Consumo de Drogas, Alcohol y Tabaco 2016-2017 (ENCODAT) muestra datos de consumo de tabaco y cannabis pero de forma separada. Indican que 14.9 millones de mexicanos son fumadores actuales de tabaco y que han consumido en el último mes, lo que representa el 14.9% de la población (Reynales-Shigematsu et al., 2017), respecto, al consumo de cannabis se estima que el 2.1% consumió cannabis/marihuana en el último año, siendo ésta la droga ilegal de mayor ingesta (Villatoro-Velázquez et al., 2017).

En diferentes estudios se señala que cerca del 90% de las personas que consumen cannabis también consumen tabaco (Rabin & George, 2015; Substance Abuse and Mental Health Services Administration, 2017), por lo que el uso dual se ha convertido en un problema de salud pública, por diferentes razones:

 1)  El consumo de tabaco está asociado a diferentes enfermedades como enfisema pulmonar, enfermedad pulmonar obstructiva crónica (EPOC), diferentes tipos de cáncer (de pulmón, de garganta, de hígado, próstata, mama y páncreas), asma, accidentes cerebrovasculares, enfermedades dentales, entre otras (Departamento de Salud y Servicios Humanos de los EE. UU., 2014; Organización Mundial de la Salud [OMS], 2018). Así mismo, el consumo de cannabis, se ha asociado a una mayor probabilidad de desarrollar enfermedades respiratorias similares a las provocadas por el consumo de tabaco, además de daño cognitivo (pérdida de memoria, falta de concentración y atención), síndrome amotivacional y deficiencia inmunológica (Academia Nacional de Medicina, 2017; National Institute on Drug Abuse, 2020). Algunas de las consecuencias del uso dual de tabaco y cannabis, son un mayor riesgo de presentar problemas psiquiátricos y psicosociales, riesgos a la salud adicionales a los derivados del consumo de una sola sustancia (p.e. infecciones articulares periprotésicas), una menor calidad de vida; adicionalmente se ha  señalado que los consumidores duales presentan un riesgo adicional de exposición a sustancias tóxicas en comparación con los usuarios frecuentes de tabaco (p. e. niveles más altos de monóxido de carbono), aunado a que el humo de cannabis puede tener niveles más altos de carcinógenos que el del tabaco (Fairman, 2015; Meier & Hatsukami , 2016; Mier et al., 2016; McClure et al. 2020; Voci et al., 2020 Oster et al., 2023).

2) El uso dual incrementa los efectos reforzantes del consumo, lo cual aumenta la dependencia de una o ambas sustancias (Rabin & George, 2015) y con ello el incremento de la dificultad para lograr la abstinencia a ambas sustancias o a una de las dos (Norberg et al., 2014; Foster et al., 2016; McClure et al., 2018;). Se han demostrado que los usuarios de cannabis presentan menores tasas de abstinencia a la nicotina y mayor probabilidad de presentar caídas en el consumo de tabaco en comparación con los no usuarios (Rogers et al., 2020; Voci et al., 2020; Weinberger et al., 2020).

3) Se asocia a otras conductas de riesgo especialmente en jóvenes y adultos jóvenes, por ejemplo: existe un incremento del uso de otras drogas y alcohol, manejar bajo el efecto del cannabis, disminución del uso del condón (Schauer & Peters, 2018).

Algunos de los factores que explican el inicio y el mantenimiento del consumo de drogas, particularmente de tabaco y de cannabis están relacionados con la baja percepción de riesgo y la falta de conocimiento sobre las consecuencias del consumo. La percepción de riesgo está definida como un proceso cognitivo donde están involucradas las creencias, actitudes y la posibilidad de controlar los efectos del riesgo tomado (De San Jorge et al., 2016; García, 2012).

Un modelo que explica este fenómeno es la teoría de la conducta planificada (TCP) propuesta por Ajzen, la cual se centra en la autorregulación cognitiva como un aspecto importante de la conducta humana y el control conductual percibido, haciendo referencia al grado de control percibido de determinada conducta, así como la autoeficacia, que es la confianza para realizar de forma exitosa una conducta (Ajzen, 1998; Bandura, 2000; Guzmán et al., 2014; Kumate, 2003; Saldívar, 2013). De tal manera, en el consumo de sustancias la percepción de riesgo puede incidir en la decisión de consumir o no considerando las consecuencias y la confianza que tiene la persona para afrontar los riesgos.

Consistente con lo anterior, se ha encontrado que la percepción baja de riesgo del consumo de sustancias incrementa la probabilidad para el uso de sustancias psicoactivas (Lopez-Quintero & Neumark, 2010; Yeomans-Maldonado & Patrick, 2015; Cooper et al., 2017). Romm et al. (2022) encontraron que un mayor uso de estas sustancias se correlaciona con una menor percepción de riesgo, además, de que el consumo de cannabis se percibe con una mayor aceptabilidad social y menor percepción de riesgo que el uso de cigarrillos combustibles y electrónicos.

Reynales-Shigematsu et al. (2017) señalaron que el 98.4% de los consumidores de tabaco mexicanos de 12 a 65 años conocían que el fumar causa enfermedades graves. En cuanto al consumo de cannabis, Villatoro-Velázquez et al. (2017) explican que sólo el 18% de los consumidores de drogas de 12 a 65 años respondieron que es una droga peligrosa (19.1% hombres y 17.7% mujeres) y que las mujeres presentaban una menor percepción de riesgo hacia el uso de marihuana que los hombres, fenómeno que no ocurre con otras sustancias como la cocaína o los inhalables.

Respecto a los consumidores duales se ha reportado una menor percepción de riesgo hacia el consumo de cannabis que hacia el consumo de tabaco, este aspecto se ha observado particularmente en países donde hay una mayor aceptabilidad social para el consumo de cannabis derivado de la legalización de la sustancia, quienes en ocasiones refieren su uso como medicinal y recreativo (McClure et al., 2020; Gravely et al., 2022; Nguyen et al., 2023). Popova et al. (2017) entrevistaron a 32 consumidores de cannabis y tabaco, los cuales reconocieron que fumar cualquiera de las dos sustancias era peligroso, sin embargo, el consumo de cannabis fue percibido como más seguro porque indicaron que tiene menos sustancias químicas y menor potencia adictiva. En la misma línea, Schauer et al.  (2017) encontraron en una revisión sistemática que los participantes percibían a la mariguana menos dañina, más natural y al tabaco más adictivo y dañino.

En ese sentido, mientras la percepción de riesgo hacia los productos de tabaco ha incrementado a lo largo del tiempo, el consumo de cannabis ha ido adquiriendo mayor aceptabilidad y menor percepción de riesgo en años recientes (Romm et al., 2022; Nguyen et al., 2023). Lo anterior se ve reflejado en un bajo interés por asistir a alguna intervención para dejar de consumir las dos sustancias. Strong et al. (2018) menciona que el uso dual de estas sustancias se asocia con una menor probabilidad de presentar intentos para dejar de fumar tabaco. En una muestra de 282 participantes, 78% de ellos expresaron que es extremadamente improbable que busquen un tratamiento para dejar de fumar cannabis, la mayoría consideraba sólo una reducción de su consumo (McClure et al., 2019). Además, el 71% prefirió primero dejar de fumar tabaco y después cannabis, de este porcentaje, sólo el 16% preferiría dejar de consumir ambas sustancias (McClure et al., 2019; McClure et al., 2020). En este mismo estudio, el 80% había intentado dejar de fumar tabaco al menos una vez, en tanto que sólo un 40% intentó abandonar su consumo de cannabis, sin embargo, 50% de quienes intentaron dejar de fumar tabaco percibieron un incremento en su consumo de cannabis y por el contrario 62% de quienes intentaron dejar el cannabis percibieron un incremento en su consumo de tabaco, de igual forma se les pidió que respondieran en una escala de 0 a 10 su interés para cesar el consumo de cannabis y tabaco, los resultados fueron: 2.39 en promedio para cannabis y 7.07 para tabaco (McClure et al., 2019).

Por lo tanto, estudios previos han demostrado que un incremento en la percepción de riesgo de productos de tabaco y cannabis disminuye el consumo de ambas sustancias (Popova et al., 2017; Nguyen et al., 2023), sin embargo, existe una clara tendencia a considerar el consumo de cannabis como menos dañino que el consumo de tabaco (Popova et al., 2017). Además, el uso dual incrementa la dependencia de ambas sustancias lo que dificulta el logro de la abstinencia de una sola sustancia, sin embargo, es poco frecuente que los usuarios de estas sustancias se planteen dejar de fumar cannabis (McClure et al., 2019).

El consumo de sustancias es una problemática social y de salud que ha ido evolucionando, actualmente los casos de consumo tienen características diferentes a los de hace unas décadas, ya que los usuarios no hacen uso sólo de una sustancia, si no que habitualmente consumen dos o más. Aunado a que la vía de administración es similar para tabaco y cannabis lo que podría facilitar el uso dual. Por lo tanto, resulta relevante tener un acercamiento a los usuarios duales de la población mexicana, con el fin de saber si en esta población se observa la misma tendencia que en otros países, por lo tanto, el objetivo de la presente investigación fue identificar y analizar la percepción del riesgo, consecuencias del consumo y las razones para buscar tratamiento en consumidores duales de cannabis y tabaco.

 

Método

         Se empleo un diseño interpretativo mediante el análisis de contenido de entrevistas semi estructuradas.

Participantes

Se entrevistaron a 18 personas con una media de 20.3 años de edad, nueve hombres y nueve mujeres. 14 participantes presentaban un consumo diario de cannabis, 13 un consumo diario de tabaco, cuatro un consumo semanal de cannabis y cinco un consumo semanal de tabaco. Se consideró como criterio de inclusión haber consumido las dos sustancias en los últimos 30 días, por otro lado, se excluyó a quienes presentaron un nivel de riesgo moderado o severo para el consumo de otras drogas o que estuvieran en tratamiento por otras sustancias.

Instrumentos

Alcohol, Smoking and Substance Involvement Screening Test (ASSIST). Instrumento de tamizaje elaborado por la OMS que detecta el nivel de riesgo de consumo de sustancias (Tiburcio et al., 2016).

Entrevista semiestructurada: constituida por preguntas abiertas para abordar los siguientes temas: percepción sobre los riesgos del uso de cannabis y tabaco, consecuencias del consumo y motivos para buscar tratamiento.

Procedimiento

Una vez que la investigación fue aprobada por la comisión de ética de la Facultad de Estudios Superiores Iztacala (CE/FESI/072022/1528), se utilizó la técnica de bola de nieve para obtener la muestra, así como difusión del estudio mediante redes sociales. A cada participante se le explicó el objetivo del estudio y se solicitó brindara su consentimiento informado. Posteriormente se les contactó mediante correo electrónico para la realización de una entrevista semiestructurada de forma presencial, con una duración aproximada de una hora, las cuales fueron grabadas para facilitar su análisis. Al finalizar la entrevista se dio información sobre las consecuencias del consumo de tabaco y cannabis y se les invitó a todos los participantes a asistir al programa de prevención y atención de adicciones del Centro de Atención y Orientación para Estudiantes (CAOPE), si estaban interesados en dejar de consumir las sustancias señaladas.

Análisis de datos

Se llevó a cabo un análisis de contenido por categorías (Kvale, 2011) indagando durante las entrevistas semiestructuradas los siguientes ejes: percepción de riesgo del uso dual, consecuencias del consumo a largo y corto plazo y motivos para buscar tratamiento. Las respuestas de los participantes se transcribieron en la categoría de análisis correspondiente, posteriormente se hizo una condensación de la información de los significados y experiencias de los participantes para establecer ideas generales y posteriormente realizar una interpretación a manera de conclusión.

 

Resultados

Para cumplir con el objetivo de la investigación se generaron tres categorías de análisis a priori que se fueron indagando durante las entrevistas.

Percepción de riesgo

Se realizaron preguntas relacionadas al conocimiento de los riesgos y consecuencias negativas que podría generar el uso de estas sustancias durante el próximo año, en los próximos cinco años y durante los próximos diez años.

Desde la opinión de los participantes, el consumo de tabaco puede generar enfermedades respiratorias, cáncer, problemas dentales, ascos, mareos, dolor de cabeza, ansiedad, entre otras. Todos expresaron al menos una consecuencia negativa asociada al consumo de tabaco, en cuanto al consumo de cannabis la mayoría de los participantes respondieron que podría generar enfermedades respiratorias y problemas de memoria, en cuanto al uso dual la mayoría expresó que no conocían consecuencias específicas del uso en conjunto de las sustancias pero que posiblemente podría generar mayor daño que el uso de una sola sustancia.

Consecuencias del uso dual

Se preguntó a los participantes si habían experimentado consecuencias negativas relacionadas con el consumo de tabaco, cannabis o uso dual.

Desde la experiencia de los participantes el consumo de tabaco les ha generado principalmente malestares físicos como tos, náuseas, dolor en el pecho debido al humo de tabaco y daño a los pulmones, pero ninguno reportó tener alguna enfermedad o consecuencia grave. Por el contrario, para el consumo de cannabis fueron pocos los que compartieron haber experimentado alguna consecuencia negativa por su uso, quienes identificaron alguna consecuencia, reportaron problemas de concentración y pérdida de memoria.

En cuanto al uso de las dos sustancias, fueron pocos los que identificaron alguna consecuencia en particular, específicamente expresaron que al siguiente día del uso dual experimentaron ascos, dolor de cabeza, irritabilidad y paranoia. En su mayoría los participantes únicamente identificaron malestares físicos por el uso de tabaco y no por el uso de cannabis o de ambas sustancias.

Motivos para buscar tratamiento

Se indagó cuál podría ser una razón para que dejaran de consumir cannabis, tabaco y ambas sustancias.

Al preguntar los motivos para dejar de fumar tabaco, la principal respuesta que se encontró se refiere al daño a la salud y al poco gusto por consumirlo, los participantes expresaron que en general el sabor del tabaco no les gustaba, sin embargo, lo seguían consumiendo porque no han experimentado consecuencias graves a su salud y porque les gusta la sensación de sacar humo cuando están en situaciones en donde no pueden fumar cannabis.

De igual forma, con relación al consumo de cannabis, la mayoría de los participantes respondió que el principal motivo por el que pensarían en abstenerse, es en el caso que el consumo afecte su salud o su vida académica, sin embargo, hubo participantes que expresaron que difícilmente se abstendrían debido a su tiempo de consumo y a que no identificaban alguna consecuencia negativa de su uso.

En la Tabla 1. se puede observar el análisis de cada categoría y el discurso de los participantes.

 

Tabla 1

Análisis de entrevistas

 

Categoría

Análisis

Discurso

Percepción de riesgo

Todos los participantes expresaron que el uso de tabaco puede provocar problemas de salud principalmente relacionados con los pulmones y el desarrollo de cáncer.

 

 

 

 

 

 

La mayoría de los participantes saben que el consumo prolongado de cannabis puede generar alteraciones en la memoria y problemas respiratorios.

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

En cuanto al uso dual expresaron que habría mayor riesgo a la salud que consumir solo una sustancia.

 

 

 

 

En general hay una baja percepción de riesgo de generar dependencia al cannabis.

“el tabaco puede generar problemas relacionados a los pulmones”

“tener dientes amarillos, problemas respiratorios, aroma desagradable”

“tener cáncer, dificultad para percibir aromas, afectar la condición física, generar dependencia”

“EPOC, tener cáncer, disfunción eréctil”

“problemas de respiración, problemas en la boca, cáncer”

 

“podría tener problemas respiratorios o problemas de memoria”

“daño a los pulmones porque es humo igual que el tabaco, en lo cognitivo siento que me vuelvo muy penoso al momento de hablar o exponer, por eso lo quiero dejar porque afecta la forma de comunicarme… se me olvida lo que leo y digo, que tal que no sé qué decir porque por estar marihuana se me olvidan las cosas”

“la marihuana puede generar más daño en el cerebro que en los pulmones…aunque he visto que funciona para tratamientos muy específicos, pero tal vez con un consumo muy drástico si podría generar alguna enfermedad psicológica”

sobre el consumo de cannabis… “no considero que hay un riesgo al consumir de forma responsable, consumiendo poco y controladamente, así como no hacerlo muy frecuente, una vez al mes por mucho”

 

“podría tener un mayor riesgo de tener alguna enfermedad”

“se podría potenciar el daño de ambas sustancias”

“a pesar de que el humo de la marihuana no es el mismo que el de tabaco, consumir ambas podría generar más daño a los pulmones”

 

“si yo quiero que me siga pegando igual y mantener mi consumo de marihuana sé que necesito tener una desintoxicación, de una semana se supone que es suficiente, yo lo hago dos meses, pero sé que no es necesario tanto tiempo y ya luego lo retomo”

 

Consecuencias del uso dual

Todos señalaron conocer las consecuencias del consumo de tabaco, en cuanto a cannabis algunos comentaron no conocer consecuencias negativas a largo plazo, del uso dual la mayoría no pudo identificar una consecuencia particular de la combinación de las sustancias.

 

Los participantes identificaron consecuencias negativas de su uso de tabaco al contrario del uso de cannabis en donde les fue complicado expresar algún efecto negativo, de igual forma, las consecuencias negativas que experimentan no las consideran graves.

“condición física, le estás haciendo muchísimo daño a los pulmones, a tu garganta, olor, sabor feo, en general le haces daño a todo, lo veo bastante negativo… la marihuana yo sólo veo que puede tener consecuencias negativas en un uso excesivo y prolongado, tendría problemas de atención, de memoria, sé que está ligado a la depresión, esa sensación de necesidad, también es humo, sé que algún daño te puede hacer pero no sé qué tanto”

 

“noto que cuando consumo las dos tengo asco al siguiente día y dolor de cabeza, paranoia, irritabilidad y desmotivación”

 

“supongo que el consumo de las dos sí hace daño, separadas no creo, el cigarro hace más daño que la marihuana, problemas cardiacos y todo eso…de la marihuana un poco menor”

 

“físicamente no he tenido problemas ni emocionalmente, no lo he notado, o no lo relaciono al consumo de las sustancias, es por cosas más personales”

 

“no he visto como tal una consecuencia de mi consumo en cuatro años, hasta ahora no creo que me pueda pasar algo, pero me mantengo al pendiente de que mi consumo no afecte mi vida académica o personal”

 

Razones para buscar tratamiento

En cuanto dejar el consumo de tabaco, los participantes comentaron que dejarían de consumir porque no les gusta el sabor ni los mareos o el asco que genera, comparten que no les gusta fumar pero que lo hacen para disminuir la ansiedad cuando no están fumando cannabis o en general lo asocian a disminuir estados de ansiedad o estrés.

 

 

 

En cuanto a las razones para dejar de consumir ambas sustancias, la mayoría expresó que no dejarían de consumir cannabis totalmente, a diferencia del tabaco quienes incluso mencionaron que sí les gustaría entrar a un tratamiento para cesar su consumo. Los participantes expresaron que dejarían de tener un uso dual cuando realmente el cannabis esté afectando alguna de sus áreas de vida o su salud.

“no me agrada el tabaco, pero lo fumo cuando no tengo marihuana porque me gusta la sensación de sacar humo y la respiración que se hace cuando se fuma”

“dejaría la marihuana cuando empiece a tener consecuencias a mi salud… llegar a tener problemas de memoria o concentración…”

“dejaría el tabaco por mi salud y por mi familia, mi grupo de amigas que no fuman y dejaría de fumar ambas cuando me dé cuenta que no es una solución para evitar mi estrés o ansiedad”

 

“abandonaría el tabaco, no me gustaría que me pasara algo, he visto a familiares que están enfermos, no me gustaría terminar con un tubo en la boca, la marihuana siento que la voy a dejar con el tiempo”

“dejaría de consumir tabaco si identificara que estoy teniendo algún problema de salud… dejaría la marihuana si comienzo a tener problemas de salud o concentración al estar en clase, expresar ideas o al estudiar”

“en cinco años no me veo consumiendo tabaco, la marihuana sí pero tal vez solo una vez al mes”

 

Discusión

El presente estudio permitió identificar y analizar la percepción de riesgo, el conocimiento sobre las consecuencias en la salud del consumo de tabaco, de cannabis y del uso dual de cannabis y tabaco, así como las razones para buscar tratamiento y cesar el uso dual de estas sustancias.

Dentro de los principales hallazgos relacionados a la percepción de riesgo, se observó una menor percepción de riesgo hacia el uso de cannabis que hacia el de tabaco, lo cual es consistente con otros estudios en donde se ha encontrado que en población universitaria en México se percibe como menos dañino el uso de cannabis (Salas et al., 2020). Asimismo, se identificó que hay una menor percepción de riesgo de generar dependencia al cannabis ya que varios participantes comentaron tener el control sobre la sustancia implementado diversas estrategias como: incorporar  periodos cortos de abstinencia y estar pendientes del tiempo y cantidad de consumo para evitar generar dependencia, lo cual es consistente con otras investigaciones donde los usuarios de cannabis reportan tener periodos cortos de abstinencia para no desarrollar dependencia a la sustancia (Gravely et al., 2022; McClure et al., 2020; Nguyen et al., 2023; Romm et al., 2022).

Estos resultados sustentan la teoría de la conducta planificada ya que la baja percepción de riesgo y la percepción de control en su uso de cannabis no los lleva a tomar la decisión de suspender el consumo ya que no consideraban tener un problema y que estaba bajo su control desarrollando estrategias para no generar dependencia o un daño grave a su salud o alguna otra área de su vida (Ajzen, 1998).

El discurso de los participantes del presente estudio coincide con los resultados de una investigación realizada por Clendennen et al. (2021) donde preguntaron a universitarios usuarios duales de cannabis y cigarro electrónico sobre el daño que percibían de su consumo, expresaron que asocian un mayor daño a la salud por el uso del cigarro electrónico derivado de la información que tenían sobre la reciente epidemia de EVALI (lesión pulmonar asociada al cigarro electrónico o al vapeo) en EUA, a diferencia  del consumo de cannabis en donde la mayoría opinó que es una planta con posibles propiedades medicinales y de uso terapéutico.

La diferencia en la percepción de riesgo del consumo de tabaco y la del uso de cannabis puede estar relacionada  a las advertencias e información sobre los daños que genera el tabaco a la salud, así como la falta de información o de políticas de regulación en México para productos de cannabis (Salas et al., 2020), ya que como se ha comprobado, las advertencias del daño del uso de tabaco en pictogramas, campañas de promoción de salud, entre otros, han ayudado a informar sobre las consecuencias a la salud del uso de tabaco en México (Thrasher et al., 2012).

En cuanto a las consecuencias del uso dual, la mayoría de los participantes identificaron síntomas derivados del uso de tabaco como dolor de cabeza, ascos, mareos, ansiedad y tos, en cuanto al uso de cannabis principalmente expresaron que han llegado a experimentar pérdida de memoria, dificultad para concentrarse y tos, sin embargo, no consideran que sean consecuencias graves que los lleve a cesar su consumo al menos en el próximo año. En contraste, estudios previos han hecho énfasis en el riesgo adicional de estar expuesto a más sustancias tóxicas cuando se consume tabaco y cannabis, así como a un incremento en el nivel de dependencia de ambas sustancias (Meier & Hatsukami, 2016; Voci et al., 2020).

Derivado de la baja percepción de riesgo ante el consumo de cannabis y tabaco y de la subestimación de las consecuencias negativas que han presentado por su uso dual, la mayoría de los participantes expresaron que una razón para suspender su consumo de tabaco o cannabis sería el presentar problemas de salud severos que afecten de forma significativa su salud o alguna otra área como la académica o social, esta información es consistente con McClure et al. (2019), quienes encontraron que adultos jóvenes (menores de 25 años) tienen un menor interés en cesar su consumo de cannabis o de tabaco, considerando que personas mayores de 25 años tienen una historia de consumo más prolongada y podrían presentar daños a su salud más evidentes que impacten su motivación para dejar de usar las dos sustancias.

Además, la mayoría respondió que no les gusta consumir tabaco, sin embargo, lo hacen para aliviar el malestar físico que presentan cuando están en lugares o situaciones en las que no pueden consumir cannabis. En ese sentido, era más probable que los participantes se plantearan dejar de consumir tabaco en comparación con el cannabis, resultados similares se han observado en otras investigaciones (McClure et al., 2019).

Por otro lado, es importante mencionar las limitaciones del estudio que al ser un enfoque cualitativo no es posible generalizar los resultados. Se recomienda continuar realizando investigaciones enfocadas en las características del uso dual de cannabis y tabaco considerando un posible contraste en la percepción del riesgo y las consecuencias negativas del consumo en diferentes grupos de edad, así como generar estudios con enfoque mixto donde se pueda analizar cualitativa y cuantitativamente la información obtenida en encuestas a usuarios duales y de esta manera tener una comprensión más amplia del fenómeno.

En conclusión, la baja percepción de riesgo, así como la dificultad para identificar consecuencias negativas del uso dual podría favorecer la falta de interés en dejar de consumir ambas sustancias. Los resultados de este estudio deben ser considerados por las intervenciones para cesar el uso dual, principalmente el poco interés que hay para dejar de consumir cannabis en adultos jóvenes.

 

Agradecimientos

La investigación fue realizada gracias al apoyo recibido por la Dirección General de Asuntos del Personal Académico (DGAPA) en el programa de Apoyo a Proyectos de Investigación e Innovación tecnológica (PAPIIT) de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) al proyecto IN306223.

Referencias

Academia Nacional de Medicina. (2017). El consumo del cannabis y sus repercusiones; información para el médico general.  Revista de la Facultad de Medicina, 60(1), 38-41. http://www.scielo.org.mx/scielo.php?script=sci_arttext&pid=S0026-17422017000100038&lng=es&tlng=es.


Akbar, S. A., Tomko, L. R., Salazar, A. C., Squeglia, M. L., & McClure, A. E. (2019). Tobacco and cannabis co-use and interrelatedness among adults. Addictive Behaviors. 90, 354-361. https://doi.org/10.1016/j.addbeh.2018.11.036


Ajzen, I. (1998). From intentions to actions: A theory of planned behavior. En Kuhl y Beckmann (Eds.), Action control: from cognition to behavior (p.p. 11-39). Heidelberg, Springer.


Banbury, A., Zask, A., Carter, S. M., Van Beurden, E., Tokley, R., Passey, M., & Copeland, J. (2013). Smoking mull: A grounded theory model on the dynamics of combined tobacco and cannabis use among adult men. Health Promotion Journal of Australia, 24(2), 143–150. https://doi.org/10.1071/HE13037


Bandura, A. (2000). Health promotion from the perspective of social cognitive theory. En P. Norman, C. Abraham y M. Conner (Eds.), Understanding and changing health behavior: From health beliefs to self-regulation (pp. 299-239). Harwood.


Cooper, M., Loukas, A., Harrell, M. B., & Perry, C. L. (2017). College students' perceptions of risk and addictiveness of e-cigarettes and cigarettes. Journal of American College Health, 65(2), 103–111. https://doi.org/10.1080/07448481.2016.1254638


Clendennen, S., Rangwala, S., Sumbe, A., Case, K., Wilkinson, A., Loukas, A. & Harrell, M. (2021). Understanding Collage Students Experiences Using E-Cigarettes and Marijuana through Qualitative Interviews. Journal of American Collage Health, 12(6), 1-11. https://doi.org/10.1080/07448481.2021.1998073


Departamento de Salud y Servicios Humanos de los EE. UU. (2014). Las consecuencias del tabaquismo en la salud: 50 años de progreso; Informe de la Dirección General de Servicios de Salud de los EE. UU. Recuperado de: https://www.cdc.gov/tobacco/data_statistics/sgr/50th-anniversary/pdfs/executive-summary-spanish.pdf


De San Jorge, X., Montes, M., Beverido, P., & Salas, B. (2016). Percepción de riesgo y consumo de drogas legales en estudiantes de psicología de una universidad mexicana. Revista Investigación Salud Universidad Boyacá. 3, 16-33.


Fairman, B. J. (2015). Cannabis problem experiences among users of the tobacco-cannabis combination known as blunts. Drug and Alcohol Dependence, 150, 77–84. https://doi.org/10.1016/j.drugalcdep.2015.02.014


Foster, D.W., Allan, N. P., Schmidt, N. B., & Zvolensky, M. J. (2016). Cannabis Motives and Quitting Tobacco: Smoking Expectancies and Severity among Treatment-seeking Cigarette Smokers. Addictive Disorders & Their Treatment, 14(3), 139-151. https://doi.org/10.1097/ADT.0000000000000065


García, J. A. (2012). Concepto de percepción de riesgo y su repercusión en las adicciones.  Salud y Drogas. 12, 133-51.


Gravely, S., Driezen, P., McClure, E., Hammond, D., Cummings, K. M., Chan, G., Hyland, A.,  Borland, R., East, K.A., Fong, G., Schauer, G.L., Quah, A., & Smith D. M. (2022). Differences between adults who smoke cigarettes daily and do and do not co-use cannabis: Findings from the 2020 ITC four country smoking and vaping survey. Addictive Behaviors,137, 107434. https://doi.org/10.1016/j.addbeh.2022.107434.


Guzmán, F. R., García, B. A., Rodríguez, L y Alonso, M. M. (2014). Actitud, norma subjetiva y control conductual como predictores del consumo de drogas en jóvenes de zona marginal del norte de México. Frontera norte, 26(51), 57-74


Hindocha C. & McClure E.A. (2020). Unknown population-level harms of cannabis and tobacco co-use: if you don't measure it, you can't manage it. Addiction, 116(7), 1622-1630. https://doi.org/10.1111/add.15290


Kvale, S. (2011). Las entrevistas en Investigación Cualitativa (1a ed.). Morata.


Kumate, J. (2003). Percepción De riesgo y consumo de drogas en los jóvenes mexicanos. Ptronato Nacional de Centros de Integración Juvenil A.C.


Lopez-Quintero, C., & Neumark, Y. (2010). Effects of risk perception of marijuana use on marijuana use and intentions to use among adolescents in Bogotá, Colombia. Drug and Alcohol Dependence, 109(1–3), 65–72. https://doi.org/10.1016/j.drugalcdep.2009.12.011


McClure, E. A., Baker, N. L., Sonne, S. C., Ghitza, U. E., Tomko, R. L., Montgomery, L. T., Babalonis, S., Terry, G. E., & Gray, K. M. (2018). Tobacco use during cannabis cessation: Use patterns and impact on abstinence in a National Drug Abuse Treatment Clinical Trials Network study. Drug and Alcohol Dependence, 192, 59–66. https://doi.org/10.1016/j.drugalcdep.2018.07.018


McClure, E. A., Tomko, R., Salazar, C.A., Akbar, S.A., Squeglia, L., Herrmann, E., Carpenter, M. & Peters, E. (2019). Tobacco and cannabis co-use: Drug substitution, quit interest, and cessation preferences. Experimental and Clinical Psychopharmacology, 27(3), 265-275. https://doi.org/10.1037/pha000024.


McClure, E.A., Rabin, R.A., Lee, D.C. & Hindocha, C. (2020). Treatment Implications Associated With Cannabis and Tobacco Co-use. Current Addiction Reports, 7(4), 533-544. https://doi.org/10.1007/s40429-020-00334-8.


Meier, E., & Hatsukami, D. K. (2016). A review of the additive health risk of cannabis and tobacco co-use. Drug and Alcohol Dependence, 166, 6–12.  https://doi.org/10.1016/j.drugalcdep.2016.07.013


National Institute on Drug Abuse. (2020). ¿Qué efectos tiene la marihuana? https://nida.nih.gov/es/publicaciones/serie-de-reportes/la-marihuana/que-efectos-tiene-la-marihuana


Nguyen, N., Holmes, L.M., Pravosud, V., Cohen, B.E. & Ling., P.M. (2023). Changes in perceived harms of tobacco and cannabis and their correlations with use: A panel study of young adults 2014-2020. Addictive Behaviors, 144, 107758. https://doi.org/10.1016/j.addbeh.2023.107758


Norberg, M., Oliver, J., Schmidt, N. & Zvolens, M. (2014). Cannabis Use among Treatment-seeking smokers: Motives and the moderating effects of anxiety sensitivity. The American Journal on Addictions, 23(1), 7-14.


https://doi.org/10.1111/j.1521-0391.2013.12054.x


Organización Mundial de la Salud [OMS] (2018). El tabaco rompe corazones:Elija salud, no tabaco. Recuperado de: http://www.who.int/campaigns/no-tobacco-day/2018/es/


Oster, B., Hameed, D., Bains, S. S., Delanois, R. E., Johnson, A. J., Nace, J., & Mont, M. A. (2023). Tobacco and Cannabis Use Have a Synergistic Association on Infection Risk Following Total Knee Arthroplasty. Journal of Arthroplasty. 38(10), 2137-2141. https://doi.org/10.1016/j.arth.2023.04.053


Popova, L., McDonald, E. A., Sidhu, S., Barry, R., Richers Maruyama, T. A., Sheon, N. M., & Ling, P. M. (2017). Perceived harms and benefits of tobacco, marijuana, and electronic vaporizers among young adults in Colorado: implications for health education and research. Addiction, 112(10), 1821-1829. https://doi.org/10.1111/add.13854


Rabin, R. A., & George, T. P. (2015). A review of co‐morbid tobacco and cannabis use disorders: Possible mechanisms to explain high rates of co‐use. The American journal on addictions, 24(2), 105-116. https://doi.org/10.1111/ajad.12186


Reynales-Shigematsu, L. M., Zavala-Arciniega L., Paz-Ballesteros, W.C., Gutiérrez-Torres D.S., García-Buendía J.C., Rodríguez-Andrade M.A., Gutiérrez-Reyes, J., Franco-Núñez, A., Romero-Martínez, M. & Mendoza-Alvarado, L. (2017). Encuesta Nacional de Consumo de Drogas, Alcohol y Tabaco 2016-2017: Reporte de Tabaco. México Instituto Nacional de Psiquiatría Ramón de la Fuente Muñiz; Instituto Nacional de Salud Pública, Comisión Nacional Contra las Adicciones, Secretaría de Salud. Disponible en: https://www.gob.mx/salud/conadic/acciones-y-programas/encuesta-nacional-de-consumo-de-drogas-alcohol-y-tabaco-encodat-2016-2017-136758


Rogers, A. H., Shepherd, J. M., Buckner, J. D., Garey, L., Manning, K., Orr, M. F., Schmidt, N. B., & Zvolensky, M. J. (2020). Current cannabis use and smoking cessation among treatment seeking combustible smokers. Drug and Alcohol Dependence, 209. https://doi.org/10.1016/j.drugalcdep.2020.107928


Romm, K. F., Wang, Y., Ma, Y., Wysota, C. N., Blank, M. D., Huebner, D. M., Roche, K. M., & Berg, C. J. (2022). The reciprocal relationships of social norms and risk perceptions to cigarette, e-cigarette, and cannabis use: Cross-lagged panel analyses among US young adults in a longitudinal study. Drug and Alcohol Dependence, 238. https://doi.org/10.1016/j.drugalcdep.2022.109570


Salas, B., De San Jorge, X., Beverido, P., León, C. & Cortazar, L. (2020). Percepción y consumo de mariguana: efectos del proceso de legalización en estudiantes universitarios. Archivos Venezolanos de Farmacología y Terapéutica, 39(8), 967-2020.


Saldívar, A. (2013). Autorregulación, percepción de riesgo y autoexploración de los senos para detección temprana del cáncer de mama: estudio exploratorio-descriptivo.


Schauer, G. L., Rosenberry, Z. R., & Peters, E. N. (2017). Marijuana and tobacco co-administration in blunts, spliffs, and mulled cigarettes: A systematic literature review. Addictive behaviors, 64, 200-211. https://doi.org/10.1016/j.addbeh.2016.09.001


Schauer, G. L., & Peters, E. N. (2018). Correlates and trends in youth co-use of marijuana and tobacco in the United States, 2005–2014. Drug and alcohol dependence, 185, 238-244. https://doi.org/10.1016/j.drugalcdep.2017.12.007


Stewart, B. S., Bhatia, D., Burns, E. K., Sakai, T. J., Martin, L. F., Levinson, A. H., Vaughn, A. M., Li, Y. & James, K. A. (2020). Association of Marijuana, Mental Health, and Tobacco in Colorado. Journal of Addiction Medicine, 14(1), 48-55. https://doi.org/10.1097/ADM.0000000000000533.


Strong, D. R., Myers, M. G., Pulvers, K., Noble, M., Brikmanis, K., & Doran, N. (2018). Marijuana use among US tobacco users: Findings from wave 1 of the population assessment of tobacco health (PATH) study. Drug and Alcohol Dependence, 186, 16–22. https://doi.org/10.1016/j.drugalcdep.2017.12.044


Substance abuse and mental health services administration (2017). Key substance use and mental health indicators in the United States: results from the 2016 national survey on drug use and health (HHS Publication No. SMA 17-5044, NSDUH Series H-52). Rockville, MD: Center for Behavioral Health Statistics and Quality. Substance Abuse and Mental Health Services Administration. Retrieved. College of Health Sciences, 106(5), 128. https://www.samhsa.gov/data/sites/default/files/cbhsqreports/NSDUHFFR2017/NSDUHFFR2017.pdf


Thrasher, J. F., Pérez-Hernández, R., Arillo-Santillán, E. & Barrientos-Gutiérrez, I. (2012).  Hacia el consumo informado de tabaco en México: efecto de las advertencias con pictogramas en población fumadora. Salud Pública México.  54(3), 242-53. https://www.scielosp.org/pdf/spm/v54n3/v54n3a06.pdf


Tiburcio, M., Rosete-Mohedano, M., Natera, G., Martínez, N., Carreño, S., & Pérez, D. (2016). Validity and Reliability of the Alcohol, Smoking and Substance Involvement Screening Test (ASSIST) in University Students. Adicciones, 28(1), 19-27.


Villatoro-Velázquez, A., Resendiz-Escobar, E., Mujica- Salazar, A., Breton-Cirett, M., Cañas-Martínez, V., Soto-Hernández, I., Fregoso-Ito, D., Fleiz-Bautista, C., Medina-Mora, M.E., Guitierrez-Reyes, J., Franco-Núñez, A., Romero-Martínez, M., & Mendoza-Alvarado, L. (2017). Encuesta Nacional de Consumo de Drogas, Alcohol Tabaco 2016-2017: Reporte de Drogas. México Instituto Nacional de Psiquiatría Ramón de la Fuente Muñiz; Instituto Nacional de Salud Pública, Comisión Nacional Contra las Adicciones, Secretaría de Salud. Disponible en: México Instituto Nacional de Psiquiatría Ramón de la Fuente Muñiz; Instituto Nacional de Salud Pública, Comisión Nacional Contra las Adicciones, Secretaría de Salud. https://www.gob.mx/salud/conadic/acciones-y-programas/encuesta-nacional-de-consumo-de-drogas-alcohol-y-tabaco-encodat-2016-2017-136758


Voci, S., Zawertailo, L., Baliunas, D., Masood, Z. & Selby, P. (2020). Is cannabis use associated with tobacco cessation outcome? An observational cohort study in primary care. Drug and Alcohol Dependence, 206, 107756.  https://doi.org/10.1016/j.drugalcdep.2019.107756


Weinberger, A. H., Pacek, L. R., Wall, M. M., Gbedemah, M., Lee, J., & Goodwin, R. D. (2020). Cigarette smoking quit ratios among adults in the USA with cannabis use and cannabis use disorders, 2002-2016. Tobacco Control, 29(1), 74-80. https://doi.org/10.1136/tobaccocontrol-2018-054590


Yeomans-Maldonado, G., & Patrick, M. E. (2015). The effect of perceived risk on the combined used of alcohol and marijuana: Results from daily surveys. Addictive Behaviors Reports, 2, 33–36. https://doi.org/10.1016/j.abrep.2015.05.00



Correspondencia

Jennifer Lira Mandujano, tel. 5565605640 correo electrónico: liramjenn@comunidad.unam.mx

* Facultad de Estudios Superiores Iztacala. Avenida de los Barrios 1, Col. Los Reyes Iztacala, C.P. 54090. Tlalnepantla, Edo. de México, México

** Facultad de Psicología. Gral. Francisco Villa 450, Dr. Miguel Silva González, C.P. 58110. Morelia, Michoacán, México.
CNEIP
Mtro. Juan Grapain Contreras
Innovación y desarrollo
Copyright © 2024 CNEIP A.C. Todos los derechos reservados.
     Editorial   |  Educación continua  |  Congreso   |  Consejo Nacional